Medio
centenar de mineros españoles llevan ya nueve días enterrados a 500 metros de
profundidad, para protestar porque hace dos meses que no cobran el sueldo. Lo
que ocurre en el pozo La Cueva, en Palencia, es sólo la punta del iceberg. En el
exterior, las protestas mineras, con cortes de carreteras y vías férreas, contra
el fin de las ayudas al sector, se extienden por León, Palencia y
Asturias.
Su
huelga en el norte de la provincia de Palencia, una de las pocas zonas de España
que todavía explota las minas de carbón, es la culminación de una larga disputa
por salarios impagos y el futuro de una industria anticuada que lucha por
sobrevivir en competencia con plantas de electricidad y proyectos de energía
renovables subsidiados.
Las
protestas en el sector de la minería se han incrementado con la "Marcha Negra"
emprendida por cerca de 200 mineros leoneses y el inicio esta noche de la huelga
de hambre anunciada por los representantes sindicales encerrados en el
Ministerio de Industria.
Por
su parte, se espera que confluyan en Oviedo las tres marchas emprendidas por los
más de 500 mineros asturianos procedentes de las cuencas del Nalón y del Caudal,
así como de la comarca sur occidental del Principado.
Estas
protestas se producen tras dos semanas de movilizaciones y en la víspera de la
huelga convocada en el sector contra la supresión de las ayudas a la minería del
carbón a partir de 2014 anunciada por la Unión Europea y el atraso en los pagos
de los salarios por parte de los empresarios Viloria y Victorino
Alonso.
Los
sindicalistas mantendrán su protesta hasta el día de la huelga general, el 29 de
septiembre, o hasta que vean señales de que la problemática del carbón se
soluciona.
Los
mineros encerrados en el Ministerio de Industria anunciaron su decisión de poner
fin a su huelga de hambre en la noche del miércoles y este jueves volverán a
reunirse con el Ministerio para, una vez dado por Bruselas el visto bueno al
decreto de ayudas al carbón, buscar una solución a los otros frentes abiertos,
entre los que figura el pago de las nóminas atrasadas por parte de los grupos de
empresas mineras Victorino Alonso y Viloria.
Así,
el representante de CC.OO. se mostró confiado en que los quince días que llevan
encerrados en la sede del Ministerio de Industria "hayan servido para emplear
ese tiempo para buscar soluciones". "Estamos en la idea de que mañana el
Ministerio nos dará alguna solución y esperamos poder resolverlo en una mesa",
afirmó.
